Jesús, seis días antes de la Pascua, fue a Betania, donde estaba Lázaro, el muerto, al que Jesús había levantado de la muerte.
La Pascua no lleva ya en este lugar la determinación <<de los Judíos>>, porque la que va a celebrarse es la Pascua de Jesús, que es la de Dios. Jesús va a Betania, lugar de su comunidad; es allí donde se celebra la fiesta, por ser el lugar de la vida. Esta Betania carece ya de localización precisa; es más, el paralelo de la frase: a Betania, donde estaba Lázaro, con la del 1,28: en Betania, donde estaba Juan, la asimila más bien al lugar ideal de la comunidad, fuera del mundo judío (10,40-42). El grupo de discípulos representado por los tres hermanos ha realizado su ruptura (11,1 Lect.).
Betania se identifica por ser el lugar donde está Lázaro, muerto y vivo al mismo tiempo; es la comunidad de Jesús donde la vida ha vencido a la muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario