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domingo, 14 de mayo de 2023

Jn 15,9b

 <<Manteneos en ese amor mío>>.

Como respuesta permanente al amor que les ha mostrado, pide Jesús a sus discípulos que vivan en el ámbito de ese amor suyo. Es lo propio del Espíritu recibido: el amor que responde a su amor (1,16). La comunidad es, pues, el lugar delimitado por el amor de Jesús, donde son visibles sus efectos; ese amor es su atmósfera y su experiencia. Esta exhortación traduce la de 15,4: Quedaos conmigo, que yo me quedaré con vosotros, y, como allí, es condición para el fruto.

lunes, 15 de agosto de 2022

Jn 9,9b

Él afirmaba: <<Soy yo>>.

Jn pone en boca del ciego las mismas palabras que usa Jesús para identificarse él mismo (4,25-26 Lect.; 6,20; 8,24.28.58). Están colocadas entre las dos menciones de la unción (9,6.11) y reflejan la nueva identidad del hombre acabado por el Espíritu; como Jesús, él es ahora un ungido, se ha encontrado a sí mismo.

domingo, 20 de febrero de 2022

Jn 5,9b

 Era descanso de precepto aquel día.

No se había mencionado hasta este momento que aquel día fuese descanso obligatorio. Jesús ha procedido como si no existiese, sin tener en cuenta para nada las disposiciones de la Ley ni la interpretación que de ella se daba. Muestra su absoluta independencia respecto a las instituciones de Israel, cuya desaparición, con la de la alianza, había anunciado en Caná (2,1-11). Su propuesta había sido rechazada de plano por los dirigentes. Ahora él ignora absolutamente la existencia de las instituciones, que ellos controlan. Se ha colocado al margen del sistema religioso. Su actividad en favor del hombre no está limitada por ninguna Ley.

La violación del descanso será la piedra de escándalo para los dirigentes judíos. Jesús no suscita la cuestión del día festivo ni pretende hacer polémica contra él; usa de su libertad y continúa su tarea. Para él cuenta sólo el bien del hombre en cualquier circunstancia.

martes, 1 de diciembre de 2020

Jn 1,9b

 La que ilumina a todo hombre, llegando al mundo.

La luz de la vida se describe ahora no en sí misma, sino en su acción sobre el hombre, ya insinuada en 1,4: la vida era la luz del hombre. Al decir que ilumina se hace referencia no sólo a su cualidad de ser visible (1,5: brilla), sino también a su capacidad de difusión. Es la vida que se comunica la vida que vivifica.

De hecho iluminaba e ilumina a todo hombre, porque llega al mundo / la humanidad. A pesar de las tinieblas y de las falsas luces, el hombre podía experimentar el anhelo de vida, podía valorarla y acrecentar el deseo de ella. La plenitud de vida contenida en el proyecto creador se e presentaba siempre como ideal y meta. Tenía, pues, un criterio para distinguir entre luces verdaderas y falsas, su anhelo de vida y plenitud. Por eso todos podían responder al testimonio de Juan (1,7), pues él daba testimonio de una realidad existente, pretendía despertar la conciencia de la vida, latente en todo hombre y que cada uno podía descubrir de nuevo. Sin embargo, para responder a su invitación había que darse cuenta de la situación de muerte; tal era la labor de Juan por medio de su bautismo: proponer la ruptura con la situación y la adhesión al que había de llegar y que, de hecho, ya estaba presente (1,26: entre vosotros se ha hecho presente).

Jn 21,24-25

  Jn 21,24a Jn 21,24b Jn 21,25  La comunidad presenta el testimonio del evangelista. Autor del Evangelio, el discípulo predilecto de Jesús. ...