Salió Pilato fuera, adonde estaban ellos, y les preguntó: <<¿Qué acusación presentáis contra este hombre?>>.
Primer movimiento de Pilato. Salir es ya una concesión; el poder romano se pliega en cierto modo ante el judío, que ha demostrado ya su superioridad, disponiendo del batallón (18,3.12). El término del movimiento: adonde estaban ellos, anuncia la trayectoria que va a seguir la postura de Pilato; su debilidad aflora desde el principio de la entrevista.
No usa Pilato fórmulas de cortesía, su pregunta es directa. Jesús no es para él un desconocido, puesto que sus tropas han participado en la captura. Sabe muy bien de qué lo acusan, pues lo han detenido como <<el Nazareno>>, es decir, el descendiente de David, el Mesías prometido. Así lo demostrará en su interrogatorio, cuya primera pregunta será: ¿Tú eres el rey de los judíos? Sin embargo, como juez, pide acusación formal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario